¿Por qué me pasan estas cosas?

A veces perdemos el control de nuestras propias emociones, o no tenemos la voluntad necesaria para alcanzar nuestras metas, o nos vemos envueltos en serios conflictos originados por asuntos sin importancia, o simplemente nos saboteamos, como si una parte de nosotros quisiera vernos fracasar.

En esas situaciones inexplicables es como si tuviéramos en nuestro interior un gran panel de control (con botones, diales y palancas), pero los mecanismos más sutiles y delicados de nuestro aparato psíquico hubieran quedado en las peores manos:

Ilustración de una mujer un poco loca (Título: On / Autora: Laurie Lipton)
La imagen es de Laurie Lipton

El ego crea en nosotros la ilusión de que somos conscientes de todo lo que sucede en nuestra mente. Que nuestra actividad mental es sólo la interminable corriente de nuestros pensamientos conscientes, esa vocecita interior que nunca se calla.

Pero si somos observadores atentos de nuestras emociones, podemos darnos cuenta de que en nuestro mundo interno operan también otras fuerzas, mucho más poderosas que esos pensamientos superficiales.

Si vivimos ignorando esas poderosas fuerzas inconscientes que se agitan en nuestro interior, con frecuencia nos suceden todo tipo de cosas inexplicables y tal vez nos veamos envueltos en serios problemas que nosotros mismos nos creamos involuntariamente.

La soledad, los conflictos o los problemas de salud suelen ser consecuencias de estas «misteriosas» fuerzas que actúan en nosotros sin que realmente seamos conscientes de ellas, como si fuéramos movidos por hilos invisibles.

Por ejemplo, todos somos manipulados aún hoy por los mandatos que recibimos cuando éramos niños y que generalmente se oponen al desarrollo de nuestro potencial y que nos impiden ser plenamente felices:

Por eso, la máxima «Conócete a ti mismo» es tan importante hoy como cuando fue acuñada, hace unos dos mil quinientos años en la antigua Grecia. Es el autoconocimiento lo que permite integrar y armonizar estas fuerzas vitales que nos constituyen y lo que nos posibilita reconocer y descartar aquellas otras que nos son ajenas, que la familia y la sociedad nos inculcaron y que muchas veces se oponen a nuestro desarrollo y bienestar.

Los padres cortándole las alas a su hijo

Otra manera de ver nuestra realidad psíquica, tantas veces incomprensible y contradictoria, es reconocernos como habitados por numerosas facetas independientes unas de otras, cada una con diferentes características e intereses. Como si en lugar de tener un único «yo» individual, estuviéramos formados por diferentes «yoes».

Ante todo, la persona debe saber que carece de unidad; es muchas personas diferentes. No tiene un Yo permanente e inmutable. Es siempre diferente. En un momento es una, en el siguiente momento es otra, luego es una tercera, y así de manera sucesiva, casi indefinidamente.

P. D. Ouspensky

Muchas fotos de una misma niña (Título: Yotam, 2006 / Autor: Gilad Benari)
La imagen es de Gilad Benari

La Ley de Atracción describe el milagroso proceso gracias al que creamos nuestra propia realidad. Todo el tiempo estamos atrayendo diferentes eventos y personas a nuestras vidas de acuerdo a nuestros pensamientos, emociones y creencias. Pero casi siempre lo hacemos de manera inconsciente, dejando que estos diferentes «yoes» que componen nuestra personalidad se vayan turnando en el proceso de creación. El resultado suele ser entonces bastante caótico, contradictorio e impredecible.

Por ejemplo, las mujeres en este video parecen llevar adentro, entre otros, un cierto «yo» bastante cruel que les dice que no son lo suficientemente lindas como para relajarse y sonreír frente a una cámara:

Publicidad de Dove

Nuevamente es el recorrido de nuestro propio camino espiritual lo que nos permite hacer realidad esa unidad, por ahora tal vez sólo ilusoria. Es ese proceso de aprendizaje lo que posibilita el reconocimiento, la comprensión, la transformación y la integración de todos esos diferentes «yoes» en una auténtica unidad. Es esta unificación interna (que se refleja también hacia afuera, ya que a la vez nos hacemos Uno con los demás, con la Naturaleza, con Dios) lo que nos devuelve el poder sobre nosotros mismos y sobre la realidad que creamos cada día.

Actualmente los poderes económicos manipulan a la gente a través de los medios de comunicación. Se aprovechan de que las personas suelen actuar mecánicamente y de manera inconsciente, respondiendo de un modo previsible ante ciertos estímulos.

El siguiente video contiene un mensaje de Osho que hoy en día parece más vigente que nunca:

El video muestra algunas escenas de manifestaciones y protestas, tal vez para agregarle un poco de dramatismo al mensaje. Pero nuestra responsabilidad individual comienza simplemente por despertar, por comprender lo que está sucediendo en nuestras vidas. El solo hecho de tomar conciencia de que no estamos obligados a creernos todo lo que dicen los medios, ni a obedecer pasivamente los mandatos que nos inculcaron en el pasado ni a repetir las mismas conductas mecánicas de siempre, ya tiene un inmediato efecto sanador.

Para sanar nuestra mente

Existen diferentes técnicas o disciplinas que producen el inesperado efecto de cambiar lo que vemos afuera (nuestra realidad material y nuestras relaciones) si nos concentramos primero en nuestro mundo interno.

Es que la realidad que vemos es literalmente una proyección de lo que sucede en nuestro interior. Al principio esta idea puede parecer tonta o infantil, una forma de pensamiento mágico. Pero en cuanto descubrimos este mecanismo funcionando realmente en nuestras vidas, comenzamos a encontrar confirmaciones allí donde miremos. El siguiente es un fragmento de «Demian», una novela de Hermann Hesse:

Cuando odiamos a un hombre, odiamos en su imagen algo que se encuentra en nosotros mismos. Lo que no está dentro de nosotros mismos no nos inquieta.

Las cosas que vemos son las mismas cosas que llevamos en nosotros. No hay más realidad que la que tenemos dentro. Por eso la mayoría de los seres humanos vive tan irrealmente, porque cree que las imágenes exteriores son la realidad…

Hermann Hesse

Algunos caminos para sanar nuestra mente, para expandir nuestra consciencia:

Axel Piskulic

Si te gustó este artículo, por favor...

No te vayas sin compartirlo

No te vayas sin dejar tu comentario

No te vayas sin suscribirte gratis por mail... Gracias!

Para suscribirte gratis y no perderte ningún artículo

297 comentarios en “¿Por qué me pasan estas cosas?

  1. Este artículo me hizo entender mi problema mental por así decirlo o mejor dicho mi tema personal el de mi interior. Me hizo entender cómo debo afrontar mi vida. En mis ataques de ansiedad y pánico sé q hay algo q debe salir de mi adentro pero veré cómo, espero la terapia me ayude. Gracias.

    ADRIANA

  2. ¡Feliz Año Nuevo, Axel! Me gusto mucho (como de costumbre), este mensaje. Lo voy a compartir con mis sobrinos.

    Estoy trabajando en mí misma, y esto me ilustra mucho. Aprendo, reflexiono, cambio.

    Gracias.

  3. Realmente tiene ud mucha razón, el ser humano tiene muchos «yo» y creo que muy pocas personas lo entienden, muy pocas nos detenemos a analizar que nuestras acciones son el resultado de nuestros pensamientos.

  4. Practicar Ho’oponopono es lo mejor que pude encontrar dentro de todo lo espiritual que te enseñan, llevo casi 7 meses en practicarlo y veo muchos cambios en mi vida. Aún falta mucho por recorrer pero me siento muy cómoda practicándolo, gracias por compartir sus experiencias y sabiduría.

  5. Leyendo esto me pregunto el porqué no tengo amigas de verdad, y qué es para mí una amiga de verdad, pues por lo pronto que tengamos mucho en común como aficiones y gustos y manera de ver la vida. Hace muchos años sí tenía, me casé me fui a otra ciudad y de eso hace mucho y he conocido a muchísima gente, pero no sé qué ha pasado, que en este momento echo en falta el tener una amiga-as de verdad, yo creo que no soy la culpable, he conocido a personas con las que me hubiera gustado comenzar una amistad y ellas no han querido, sólo son conocidas con las que me paro cuando nos vemos por la calle y nada más, y he hecho amistad por casualidad con otras, que ahora mismo veo que no tenemos nada en común, y cuando estoy con ellas no me siento yo misma, no nos une nada, nos vemos los viernes por la tarde como una inercia, pero nada más, sólo los años que nos conocemos, debido a que íbamos al mismo parque con los niños.

    A veces veo a mujeres que tienen una amistad muy buena entre ellas, y siento sana envidia, y yo me pregunto, ¿por qué yo no? Me considero una persona sociable y agradable, ¿qué ha ocurrido?

  6. Conocerse a sí mismo para aprender aquello acorde con nuestra naturaleza y poder atraer todo lo bueno para nuestra vida además de una capacitación para desarrollar las habilidades o talentos innatos.

  7. Me encantan tus artículos!

    Sabes, siempre me he preguntado por qué es qué mientras uno se esfuerza y da lo máximo, a otras personas sin el mínimo esfuerzo y sin andar sufriendo como uno tiene mejores resultados…

    Sé que no debería afectarme eso, pero sí, es desesperante y no sé cómo reaccionar.

    Muchas gracias!

  8. Lo que no se acepta es porque las cosas no pasan como estaban planeadas y tienes que luchar en contra de tantas cosas y al final las cosas pasan para unos y para otros no, a unos se les dan las cosas como el amor en una pareja, uno tiene el amor de otra persona y tú te quedas solo y con todo el dolor y luego no pasa nada más que la soledad y te dicen tienes que esperar, los tiempos de Dios son perfectos, pero bueno con eso te consuelan para que no te desanimes pero que más da, te conformas solo con la soledad, buen artículo.

  9. Hola, pues bien, lamento mucho que tarden tanto tiempo para enviar más y más mensajes nuevos. Por supuesto este mensaje no me he cansado de leerlo pero me super encantaría recibir mil mensajes más, me ponen muy bien y aprendo muchísimo…

    Por favor. No dejen de mandar más información.

    Con cariño.

    Maryell

  10. Muchas gracias por tan bellos contenidos, siento que sus mensajes me dan paz y tranquilidad, quiero encontrar ese ser maravilloso que soy, estoy en busca de mi verdadera felicidad, y saben una cosa, lo estoy logrando, no es nada fácil deshacerse de esos pensamientos que me hacían sufrir, pero he encontrado el verdadero milagro de mi vida y es la divinidad pura. Lo siento mucho, perdóname, te amo, y gracias.

  11. Gracias, gracias, gracias.

    Me emociona entender comportamientos propios o de otros, y de esta manera poder aceptar y amar cada circunstancia.

    Cálido abrazo, luminosas bendiciones.

  12. La verdad increíble, nunca había visto mis problemas desde este punto de vista sino de otro totalmente negativo, muy bueno el artículo y positivo.

  13. Gracias Axel. Cuando encontramos nuestro propio yo, resulta doloroso. Y es porque nos damos cuenta que lo que vivimos resuelta consecuente con nuestra propia manera interna de actuar, algunas consciente otras desafortunadamente no. Cuando tomamos conciencia de ello surge las preguntas ¿por qué me pasan estas cosas? y ¿por qué una y otra vez?

    Gracias. Un abrazo…

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *