Las reglas del juego

Dos mujeres, una feliz y otra triste.

Mi madre siempre me decía que la felicidad es la clave para la vida. Cuando fui a la escuela, me preguntaron qué quería ser cuando fuera grande. Dije «feliz». Me dijeron que no entendía la pregunta…

Y yo les respondí que ellos no entendían la vida.

John Lennon

Si me preguntaran si soy completamente feliz, mi respuesta sería, prácticamente siempre, que no. Que lo sería si algunas circunstancias mejoraran, cambiaran o se resolvieran favorablemente. Casi siempre faltaría «algo» para sentirme feliz o, al menos, para sentirme plenamente feliz.

La vida muchas veces parece reducirse a tratar de modificar ese conjunto de circunstancias que «están mal», que serían las que nos impiden ser plenamente felices.

No habría nada de malo en esto si alguna vez realmente pudiéramos resolver esos innumerables problemas y finalmente alcanzáramos el estado de bienestar que tanto anhelamos. Pero pasan los años y esto parece suceder muy pocas veces.

La vida no es un problema que tiene que ser resuelto, sino una realidad que debe ser experimentada.

Soren Kierkegaard

Tal vez el único problema real sea haber aceptado esta regla equivocada, haber adoptado la creencia de que la felicidad depende de la solución de ciertos problemas.

Quizás, si nos permitiéramos revisar nuestras creencias (que son las reglas con las que «jugamos» este juego tan particular que es la vida), podríamos definirlas de manera que podamos sentirnos bien siempre, con relativa independencia de lo que pase «afuera».

La vida no es esperar a que pase la tormenta. Es aprender a bailar bajo la lluvia.

¿Y si estuviéramos participando del «juego de la vida» con mucho empeño y con todo nuestro entusiasmo… pero ajustándonos a unas reglas equivocadas?

El ser humano tiene la creencia errónea de que necesita algo para ser feliz. (del libro 'El esclavo', de  Francisco J. Ángel
De ‘El esclavo’, de Francisco J. Ángel.

En cada momento de nuestras vidas, en cada circunstancia, casi sin excepciones, existen los suficientes elementos maravillosos como para colmarnos de dicha, de felicidad plena. Pero en lugar de asombrarnos y de disfrutar de lo que cada instante nos ofrece, pasamos por alto esos pequeños milagros, los consideramos ordinarios, naturales y cotidianos, y, en cambio, destacamos y nos concentramos en eso de lo que el momento carece.

La mejor «regla», entonces, es apreciar en cada circunstancia aquello con lo que la vida nos está agasajando, y disfrutarlo plenamente. Lo que hoy no tenemos (¡lo que no tenemos todavía!) será tal vez eso con lo que la vida, generosa y abundante siempre, nos sorprenderá en algún otro momento irrepetible…

Axel Piskulic

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250 comentarios en “Las reglas del juego

  1. Axel: te agradezco tanto! Cada artículo reafirma en mí conocimientos alguna vez leídos, pero no incorporados totalmente. Leeré uno por día hasta que se hagan carne en mí.

  2. Cada vez me siento más cómoda con la idea de q todos los obstáculos los inventamos nosotros mismos en algún lugar q no recordamos y q después nos pusimos la máscara del personaje q estamos representando aquí… esa máscara podrías llamarse «ego» y no nos deja recordar ni apreciar las señales de aviso q nosotros mismos dejamos para recordar la verdadera esencia de actores y jugadores con muchos deseos de tener aventuras, obstáculos y laberintos para superar y al final de cada misión cumplida, abrazar a amigos y rivales y sentirnos felices todos… siempre!

  3. Me encanta, Axel, leer los artículos que me mandan! Pues me ayudan a reflexionar sobre la vida misma, y de como podemos ir creciendo cada día para poder ser mejores personas y seguir aprendiendo. Pero lo mejor de todo es que los estoy compartiendo con mis amigos y familia. Mil gracias!! Sé que voy por buen camino y espero subir al siguiente nivel, pues no es casualidad que yo haya entrado en esta página, Dios tiene un propósito en mi vida! Amén! Reciba un cariñoso abrazo desde Guatemala!!

  4. Cómo me alegra haber encontrado este blog.

    Cada artículo me abre los ojos y me hace sentirme bien conmigo misma.

    Por cierto el juego del gato es muy entretenido 😉

    ¡Saludos!

  5. Gracias por el artículo, creo que nunca está de más estar todo el tiempo recordando que la clave de la felicidad sin duda la tiene uno. Creo que uno de los principales aspectos para poder hacerla surgir de nuestro interior es la Aceptación, pero no se trata de esa aceptación de mediocridad, sino del reconocer y reconocernos como seres únicos y especiales, identificar nuestra función y labor en la vida y ser capaces de apoderarnos pero al mismo tiempo de fluir, considerar que a veces existen situaciones que no dependen de uno y otras que podemos ir cambiando. Es complejo pero lo importante es saber que la felicidad esta ahí, frente a nosotros, tan solo esperando ser reconocida. 🙂 y también que la tristeza no es ajena a la felicidad, pues sin ella no podríamos reconocer la otra.

  6. Conocía el juego, Axel, como suponías, y eso me permitió disfrutar y aprehender tu mensaje respecto de las reglas del juego, un tema al que le dedico atención desde mi profesión de Coach para la determinación de los contextos.

    ¡Un artículo excelente!

    ¡Felicitaciones!

    Rita Tonelli

  7. Amigo Axel:

    Gracias una vez más por toda esta información que me envías, ya que es para mí de mucha utilidad, para la charla que damos a los jóvenes que están próximos a recibir el sacramento del matrimonio.

    Recibe un cordial saludo de parte de mi esposa y de un servidor y que Dios te bendiga.

  8. Gracias Axel, se cree que se vive y lo que hacemos es dejar de vivir en paz y feliz, poco sabemos de manejar nuestros sentimientos e impulsos, solo al recapacitar y leer las enseñanzas de otros en sus mensajes, tomamos un minuto para reflexionar y vemos que todo es posible cuando nos amamos y damos amor.

    Nosotros sembramos nuestro propio destino.

    Saludos desde Colombia.

  9. Agradezco infinitamente la oportunidad de recibir estos correos, el tener al alcance estos mensajes, me sirven no tan solo para reflexionar sino que también para no dejarme vencer y poder tener esperanzas en mi vida. MIL GRACIAS.

  10. Saludos: Quiero agradecerles x existir y saber q cada vez q recibo un mail de ustedes me reconfortan en mis momentos de debilidad, cuando el apego aparece nuevamente, pero con sus palabras vuelvo al sendero, a la libertad. Un saludo desde Ecuador.

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