En la película The Truman Show, el protagonista es a su vez el involuntario personaje principal de un «reality show» muy particular. Él lo ignora, pero desde su primer día de vida todo lo que sucede a su alrededor está escrito en un guión y representado por actores profesionales. Mientras tanto, en todo momento está siendo filmado y sus reacciones son transmitidas en directo por el programa de televisión de mayor «rating», precisamente «The Truman Show».
Se puede establecer una interesante correspondencia entre el engaño del que es víctima Truman en la película, y lo que está ocurriendo en todo momento en el interior de cada uno de nosotros.
- La vida de Truman se ajusta a un guión. Él no lo sabe, pero no es realmente libre. Salvando las distancias, nosotros somos víctimas de estrictos condicionamientos familiares y culturales de los que no podemos apartarnos fácilmente.
- Quienes acompañan a Truman en su vida de ficción fueron cuidadosamente seleccionados a través de un «casting». Inconscientemente, nosotros también elegimos sólo la compañía de las personas que nos permiten representar nuestro «guión».
- Truman no cuestiona algunas circunstancias muy sospechosas de la vida que le es impuesta, simplemente porque nadie a su alrededor las cuestiona tampoco. Y acepta sin mucho análisis las endebles explicaciones que recibe cuando plantea sus primeras dudas. En nuestra sociedad, conductas como el consumo o la búsqueda de éxito económico le dan un muy discutible sentido a la vida, que muchas personas prefieren no cuestionar.
- El «mejor amigo» de Truman, a quien finalmente él acude para plantearle que comienza a sospechar que ese mundo en el que viven es una farsa, intenta por todos los medios sostener el engaño, traicionándolo una vez más. Es como nuestro ego, que con falsas promesas nos convence una y otra vez de seguir viviendo en la ilusión.
- El miedo, en la forma de una fobia al agua, al océano, que le es inculcada a Truman desde muy chico para poder luego manipularlo, es la última barrera que tiene que superar para poder alcanzar la libertad. También nosotros imaginamos todo tipo de peligros que nos impiden tomar algunas decisiones liberadoras en nuestras vidas.
- El productor del programa de TV, al poder controlar absolutamente todo lo que sucede en el mundo de Truman (que en realidad es un enorme set de filmación), es el equivalente a ese Poder que llevamos dentro, capaz literalmente de llevar a cabo verdaderos milagros. Nuestro destino es escapar de esta realidad en la que parecemos estar atrapados, luego de haberla construido hasta en sus detalles más realistas con el auxilio de este Poder.
- Finalmente, a Truman lo guían su intuición, el anhelo de ser libre y el amor de la única persona que fue honesta con él. Como a él, también a nosotros nos espera la libertad y, por suerte, también somos guiados a través de la intuición, el anhelo de libertad y el amor…
Axel Piskulic
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